Esta película de nuestra infancia se come a 'Bluey' y es perfecta para ponérsela a tus hijos. Eso sí, prepárate para la nostalgia
Qué podemos decir a estas alturas de Bluey que no sepan ya todos los que tienen un hijo pequeño. Y es que la obra australiana se ha convertido en un éxito de masas. Ir a una tienda infantil es encontrarte cualquier accesorio que te puedas imaginar llena de dibujos de la mítica familia, lo que demuestra que su último estreno mantiene a la serie en el Olimpo de las producciones infantiles.Pero hay una película de nuestra infancia que mantiene un nivel de forma excelente todavía. Tanto que, pese a haber sido parte de mi niñez, también lo es de muchas generaciones anteriores y posteriores, ya que se estrenó ni más ni menos que en los años 60 cuando Disney hacía obras que eran prácticamente atemporales.Una aventura sin igualPongo y Perdita viven felices con sus dueños y sus cachorros. Son una familia que lo tiene todo dentro de los dálmatas, pero hay un problema terriblemente grave. Cruella De Ville, la excéntrica multimillonaria que vive en la ciudad, se ha enterado de que han tenido cachorros, así que su misión es raptarlos para hacerse un abrigo de piel con ellos.Por otro lado, si la película se hace demasiado vieja para ti, tienes el estupendo live action en el que Glenn Close se come la pantalla como una Cruella impresionante en sus postulados y en su historia. Así, la película tiene una trama que no envejece y es que no hay nada que podamos querer más en el mundo que a nuestras mascotas.Ambas películas son muy cortitas, y seguro que moriremos de nostalgia al verlas y engancharán a nuestros hijos con sus historias tan divertidas y con unas aventuras que no tienen nada que envidiar a las que se viven en el cine de animación hoy en día.Es cierto que Bluey es una serie mucho más contenida, con unas tramas más sencillas aunque profundas a la hora de aportar una historia. Sin embargo, es importante tener en cuenta que sus capítulos más largos también ofrecen cuestiones más complejas, e incluso se trata el tema del aborto de la madre de Bluey.Si nos planteamos el lugar en el que podremos ver esta película, está claro que el punto escogido es, ni más ni menos, que el catálogo de Disney+, algo que es lógico a todas luces si tenemos en cuenta que Disney es la creadora de esta obra.No es la única película de la época dorada de Disney que podemos disfrutar. Al contrario, está disponible todo su catálogo, al igual que ocurre con todo el Universo Cinematográfico de Marvel, por poner un ejemplo de películas más recientes.El artículo Esta película de nuestra infancia se come a 'Bluey' y es perfecta para ponérsela a tus hijos. Eso sí, prepárate para la nostalgia fue publicado originalmente en Andro4all.
Qué podemos decir a estas alturas de Bluey que no sepan ya todos los que tienen un hijo pequeño. Y es que la obra australiana se ha convertido en un éxito de masas. Ir a una tienda infantil es encontrarte cualquier accesorio que te puedas imaginar llena de dibujos de la mítica familia, lo que demuestra que su último estreno mantiene a la serie en el Olimpo de las producciones infantiles.
Pero hay una película de nuestra infancia que mantiene un nivel de forma excelente todavía. Tanto que, pese a haber sido parte de mi niñez, también lo es de muchas generaciones anteriores y posteriores, ya que se estrenó ni más ni menos que en los años 60 cuando Disney hacía obras que eran prácticamente atemporales.
Una aventura sin igual
Pongo y Perdita viven felices con sus dueños y sus cachorros. Son una familia que lo tiene todo dentro de los dálmatas, pero hay un problema terriblemente grave. Cruella De Ville, la excéntrica multimillonaria que vive en la ciudad, se ha enterado de que han tenido cachorros, así que su misión es raptarlos para hacerse un abrigo de piel con ellos.
Por otro lado, si la película se hace demasiado vieja para ti, tienes el estupendo live action en el que Glenn Close se come la pantalla como una Cruella impresionante en sus postulados y en su historia. Así, la película tiene una trama que no envejece y es que no hay nada que podamos querer más en el mundo que a nuestras mascotas.
Ambas películas son muy cortitas, y seguro que moriremos de nostalgia al verlas y engancharán a nuestros hijos con sus historias tan divertidas y con unas aventuras que no tienen nada que envidiar a las que se viven en el cine de animación hoy en día.
Es cierto que Bluey es una serie mucho más contenida, con unas tramas más sencillas aunque profundas a la hora de aportar una historia. Sin embargo, es importante tener en cuenta que sus capítulos más largos también ofrecen cuestiones más complejas, e incluso se trata el tema del aborto de la madre de Bluey.
Si nos planteamos el lugar en el que podremos ver esta película, está claro que el punto escogido es, ni más ni menos, que el catálogo de Disney+, algo que es lógico a todas luces si tenemos en cuenta que Disney es la creadora de esta obra.
No es la única película de la época dorada de Disney que podemos disfrutar. Al contrario, está disponible todo su catálogo, al igual que ocurre con todo el Universo Cinematográfico de Marvel, por poner un ejemplo de películas más recientes.
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