Hace casi 20 años llegó un legendario simulador de colonias que, durante todo este tiempo, ha sido conocido por una sola cosa: su complejidad. Dwarf Fortress, lanzado en 2006, antes siquiera de que los accesos anticipados fueran una realidad, ha estado en constante desarrollo hasta que en 2022 alcanzó su versión completa. No obstante, ha sido ahora cuando los dos autores de esta chifladura, Tarn y Zach Adams, han podido celebrar la "fiestecita" que una vez imaginaron hace dos décadas. ¿El motivo? Han alcanzado el millón de copias vendidas.
Así lo ha anunciado la editora Kitfox Games, que compartió la noticia con entusiasmo al celebrar el respaldo masivo de los jugadores. "Cada copia da vida a innumerables enanos, fortalezas y mundos únicos. ¡Gracias a todos los que nos han apoyado!", señalaron desde el estudio.
Los padres de Dwarf Fortress no solo son millonarios, ya pueden celebrarlo
Claro está, el éxito de Dwarf Fortress en Steam no ha sido una sorpresa total, dado su impresionante rendimiento desde su llegada a la plataforma a finales de 2022. En apenas dos meses ya había vendido medio millón de copias, en gran parte gracias a su renovada interfaz y al reemplazo del clásico arte ASCII por gráficos dibujados a mano. Estas mejoras acercaron el juego a un público más amplio y convirtieron rápidamente a sus creadores, los hermanos Adams, en millonarios.
A mediados de 2023, las cifras alcanzaban las 800.000 unidades vendidas, y el lanzamiento del esperado modo aventura impulsó aún más su popularidad. Apenas tres meses después de esa actualización, el título logró superar el codiciado millón. Curiosamente, ni siquiera Tarn Adams creía posible alcanzar tal hito: "O sea, ni siquiera lo pensé", confesó en una entrevista con PCGamer.
Pero el momento finalmente llegó, y los desarrolladores ya se han dado permiso para celebrarlo con una pequeña fiesta… e incluso un viaje exótico. Ahora que por fin han superado la barrera del millón de copias vendidas, el juego no solo entra en una "nueva era" centrada en expandir y profundizar aún más sus complejos sistemas internos, sino que también pueden cumplir al fin con aquella fiestecita que tanto esperaban.
Eso sí, estos días de asueto serán breves, ya que entre las prioridades actuales se incluyen mejoras en los asedios, la construcción de asentamientos en el modo aventura y la reescritura de las capas subterráneas del mundo, que estarán más conectadas con las mecánicas mágicas y la generación procedural. El futuro de Dwarf Fortress sigue más vivo que nunca, y aunque ahora haya vendido más de un millón de copias, la ambición del proyecto no deja de crecer.