Mononoke es la princesa más famosa de Ghibli, pero mi corazón siempre será de Nausicaä
Amar el cine de Ghibli es síntoma de ser humano. Tal vez porque detrás de la arisca fachada de Hayao Miyazaki se esconde una persona empapada de humanidad, con todo lo bueno y lo malo que eso conlleva. Esto puede explicar, en parte, su aparente aridez en ocasiones. Sin embargo, lo que es seguro es que sus películas son un auténtico manifiesto de humanismo, tanto en el fondo como en la forma. Dos de mis películas preferidas de Ghibli tienen como protagonistas a princesas: Nausicaä del Valle del Viento y La Princesa Mononoke. Aunque las separan unas cuántas décadas, a las dos las une una inteligente mirada crítica a la humanidad. Un espíritu compartido La ecología y la naturaleza son temas centrales en ambas películas, aunque se presentan de maneras distintas. Nausicaä del Valle del Viento ofrece una visión más optimista sobre la coexistencia entre humanos y la naturaleza. La protagonista, Nausicaä, se esfuerza por entender y mediar en la relación entre los seres humanos y el mundo natural, tratando de encontrar un equilibrio. En cambio, La Princesa Mononoke se sumerge en una perspectiva más oscura y combativa, donde los conflictos entre humanos y naturaleza son evidentes y sangrientos. En las dos la naturaleza muestra sus mecanismos de defensa contra la humanidad. En Nausicaä no parece del todo consciente de su papel dentro del gran equilibrio y la princesa se sitúa en una postura más defensiva que San, la princesa lobo de Mononoke, mucho más reaccionaria ante los estragos creados por la humanidad en el mundo natural, representando la ira de la naturaleza que busca vengarse de la humanidad. El viaje de Shuna (Salamandra Graphic) Amazon — 23,70 € * Algún precio puede haber cambiado desde la última revisión Otro punto relevante es el enfoque pacifista de Nausicaä, quien prefiere la empatía y la comunicación antes que el enfrentamiento. En contraste, La Princesa Mononoke pasa de las acciones de defensa al ataque, manifestando que la lucha por la supervivencia lleva a un conflicto abierto. Muchas de estas ideas también aparecen en El viaje de Shuna, un manga de Miyazaki que ha permanecido inédito en España hasta ahora y que se encuentra a caballo en lo estético y argumental entre las dos películas. La Princesa Mononoke Dos princesas atípicas La Princesa Mononoke ofrece una serie de personajes más complejos que los presentes en Nausicaä, con motivaciones multifacéticas, tal vez fruto de una evolución del cine de Ghibli de un foco más dirigido a un público juvenil a uno mucho más general. Nausicaä, con su carisma y su compasión, se convierte en una figura central que trasciende el arquetipo de la princesa. En su viaje, se convierte en un símbolo de esperanza y reconciliación. Los personajes de La Princesa Mononoke, aunque son arquetípicos en algunos aspectos, como el villano que justifica sus acciones por el bien de su pueblo, presentan una complejidad que resulta mucho más interesante, moviéndose en una gama de grises mucho menos contrastada que la de Nausicaä. Nausicaä del Valle del Viento Las relaciones interpersonales en Nausicaä son igualmente significativas. La conexión de Nausicaä con los insectos y su capacidad para comunicarse con ellos enfatizan su empatía y deseo de entendimiento. Contrasta con la tensión entre San y Ashitaka en La Princesa Mononoke, donde las interacciones están marcadas por la desconfianza y el conflicto. La dinámica de poder entre los personajes en Mononoke es fascinante, pero quizás menos positiva en comparación con la construcción de relaciones de Nausicaä, donde la comunicación y la comprensión son clave. La Princesa Mononoke Los años no pasan en vano El estilo visual y la animación son aspectos fundamentales que diferencian a ambas películas. Nausicaä del Valle del Viento presenta un diseño más estilizado y una paleta de colores vibrantes que reflejan la belleza del mundo natural. La técnica de animación, aunque innovadora para su tiempo, sienta las bases para las impresionantes escenas de acción en La Princesa Mononoke, que llegaría más de una década después, con lo que eso significa a nivel técnico, con una animación que se vuelve visceral y la violencia cobra vida de manera impactante. Nausicaä sienta las bases para las impresionantes escenas de acción en La Princesa Mononoke, que llegaría más de una década después La innovación técnica es un punto crucial; Nausicaä fue un hito en la animación japonesa, influenciando no solo a Ghibli, sino a toda la industria. La forma en que se presenta el movimiento y la fluidez en las escenas de vuelo anticipó lo que se vería en Mononoke, donde la acción se siente aún más dinámica y emocionante. La rica atención al detalle en la creación de los paisajes y personaj
Amar el cine de Ghibli es síntoma de ser humano. Tal vez porque detrás de la arisca fachada de Hayao Miyazaki se esconde una persona empapada de humanidad, con todo lo bueno y lo malo que eso conlleva. Esto puede explicar, en parte, su aparente aridez en ocasiones. Sin embargo, lo que es seguro es que sus películas son un auténtico manifiesto de humanismo, tanto en el fondo como en la forma. Dos de mis películas preferidas de Ghibli tienen como protagonistas a princesas: Nausicaä del Valle del Viento y La Princesa Mononoke. Aunque las separan unas cuántas décadas, a las dos las une una inteligente mirada crítica a la humanidad.
Un espíritu compartido
La ecología y la naturaleza son temas centrales en ambas películas, aunque se presentan de maneras distintas. Nausicaä del Valle del Viento ofrece una visión más optimista sobre la coexistencia entre humanos y la naturaleza. La protagonista, Nausicaä, se esfuerza por entender y mediar en la relación entre los seres humanos y el mundo natural, tratando de encontrar un equilibrio. En cambio, La Princesa Mononoke se sumerge en una perspectiva más oscura y combativa, donde los conflictos entre humanos y naturaleza son evidentes y sangrientos. En las dos la naturaleza muestra sus mecanismos de defensa contra la humanidad. En Nausicaä no parece del todo consciente de su papel dentro del gran equilibrio y la princesa se sitúa en una postura más defensiva que San, la princesa lobo de Mononoke, mucho más reaccionaria ante los estragos creados por la humanidad en el mundo natural, representando la ira de la naturaleza que busca vengarse de la humanidad.
El viaje de Shuna (Salamandra Graphic)
Otro punto relevante es el enfoque pacifista de Nausicaä, quien prefiere la empatía y la comunicación antes que el enfrentamiento. En contraste, La Princesa Mononoke pasa de las acciones de defensa al ataque, manifestando que la lucha por la supervivencia lleva a un conflicto abierto. Muchas de estas ideas también aparecen en El viaje de Shuna, un manga de Miyazaki que ha permanecido inédito en España hasta ahora y que se encuentra a caballo en lo estético y argumental entre las dos películas.
Dos princesas atípicas
La Princesa Mononoke ofrece una serie de personajes más complejos que los presentes en Nausicaä, con motivaciones multifacéticas, tal vez fruto de una evolución del cine de Ghibli de un foco más dirigido a un público juvenil a uno mucho más general. Nausicaä, con su carisma y su compasión, se convierte en una figura central que trasciende el arquetipo de la princesa. En su viaje, se convierte en un símbolo de esperanza y reconciliación. Los personajes de La Princesa Mononoke, aunque son arquetípicos en algunos aspectos, como el villano que justifica sus acciones por el bien de su pueblo, presentan una complejidad que resulta mucho más interesante, moviéndose en una gama de grises mucho menos contrastada que la de Nausicaä.
Las relaciones interpersonales en Nausicaä son igualmente significativas. La conexión de Nausicaä con los insectos y su capacidad para comunicarse con ellos enfatizan su empatía y deseo de entendimiento. Contrasta con la tensión entre San y Ashitaka en La Princesa Mononoke, donde las interacciones están marcadas por la desconfianza y el conflicto. La dinámica de poder entre los personajes en Mononoke es fascinante, pero quizás menos positiva en comparación con la construcción de relaciones de Nausicaä, donde la comunicación y la comprensión son clave.
Los años no pasan en vano
El estilo visual y la animación son aspectos fundamentales que diferencian a ambas películas. Nausicaä del Valle del Viento presenta un diseño más estilizado y una paleta de colores vibrantes que reflejan la belleza del mundo natural. La técnica de animación, aunque innovadora para su tiempo, sienta las bases para las impresionantes escenas de acción en La Princesa Mononoke, que llegaría más de una década después, con lo que eso significa a nivel técnico, con una animación que se vuelve visceral y la violencia cobra vida de manera impactante.
Nausicaä sienta las bases para las impresionantes escenas de acción en La Princesa Mononoke, que llegaría más de una década después
La innovación técnica es un punto crucial; Nausicaä fue un hito en la animación japonesa, influenciando no solo a Ghibli, sino a toda la industria. La forma en que se presenta el movimiento y la fluidez en las escenas de vuelo anticipó lo que se vería en Mononoke, donde la acción se siente aún más dinámica y emocionante. La rica atención al detalle en la creación de los paisajes y personajes resalta la dedicación de Miyazaki a su arte.
La estructura y el ritmo de ambas películas ofrecen una experiencia de visualización diferente, también consecuencia de los años que separan sus dos fechas de estreno. Nausicaä avanza de manera más orgánica, permitiendo que el espectador se sumerja en su mundo y comprenda la complejidad de sus temas. Pero a día de hoy resulta lenta, es innegable. La narrativa se desarrolla a un ritmo que permite la reflexión, lo que contrasta con la estructura más intensa y rápida de La Princesa Mononoke.
Un legado que deja un profundo impacto cultural
La recepción crítica y la popularidad de ambas películas han evolucionado a lo largo del tiempo. Nausicaä del Valle del Viento, estrenada en 1984, ha sido reconocida como una obra pionera que aborda temas ecológicos y sociales, ganándo un lugar especial en la cultura pop. Por otro lado, La Princesa Mononoke se ha establecido como una de las películas más icónicas de Ghibli, un estudio que ya rivalizaba con la propia Disney a nivel de repercusión social. Logrando además un reconocimiento internacional y un éxito considerable.
En un interesante artículo publicado por BBC, Neil Gaiman, el autor británico, recuerda el impacto que tuvo Princesa Mononoke al ver la escena de las gotas de lluvia sobre una piedra, señalando que fue "auténtico cine" a la altura de directores como David Lean y Akira Kurosawa. En una película que representa una desviación del tono amable de las obras anteriores de Hayao Miyazaki, Gaiman destaca que "debes ver lo que realmente está allí", refiriéndose a la complejidad moral de los personajes y la naturaleza. En lugar de retratar una lucha clara entre el bien y el mal, Princesa Mononoke presenta personajes como Lady Eboshi, quien, aunque destruye la naturaleza, también mejora la vida de los marginados.
La escritora Susan Napier, especialista en la obra de Miyazaki, complementa esta idea, señalando que en el universo de Studio Ghibli, "los humanos no son necesariamente las criaturas dominantes del mundo", lo que pone de manifiesto la fuerza de la propia naturaleza como un personaje principal de la trama que se manifiesta a través de personajes como los insectos del mundo de Nausicaä o el Shishi Gami en el de Mononoke, recuperando algunas de las simbologías y mitologías más primitivas de la humanidad.
Con todo, y a pesar de que Mononoke es uno de los grandes iconos de Ghibli, y una de sus películas más reconocibles, mi corazón pertenece a Nausicaä. Recuerdo la primera vez que vi la película, en una cinta VHS de imagen y sonido oscilante, y cómo me cautivó su universo lleno de aeronaves extrañas y paisajes deslumbrantes. Este amor por los aviones también lo comparto con Porco Rosso, otra joya de Ghibli que participa de esa misma fascinación por la aviación. La nostalgia juega un papel importante en mi preferencia por Nausicaä, ya que representa mi primer contacto con Ghibli.
Recuerdo cómo Nausicaä caló en mi imaginario personal, codo a codo con otra princesa, Leia Organa. ¿Qué tendrán las princesas guerreras? Este primer impacto de Nausicaä la diferencia de La Princesa Mononoke, que ya venía con un tremendo hype y expectativas elevadísimas cuando pude verla en cines. Nausicaä me sorprendió por su profundidad y belleza, lo que hizo que mi experiencia fuera aún más significativa frente a la de Mononoke, que era una película que ya sabía que me iba a gustar antes de verla.
Un mensaje cada día más importante
Da igual el tiempo que pase, por desgracia los mensajes sociales y filosóficos de ambas películas son todavía vigentes. Sus advertencias y su reflexión profunda sobre la relación entre humanos y naturaleza parecen incluso más urgentes hoy que en 1984 o 1997. Nausicaä aboga por el humanismo y la coexistencia, destacando la importancia de entender y cuidar nuestro entorno. En contraste, La Princesa Mononoke presenta un análisis crítico de la lucha entre la humanidad y la naturaleza, donde la violencia y la venganza parecen ser la única solución. Se parecen, pero no son iguales. Las dos, además, abogan por el entendimiento y tienen un marcado mensaje pacifista, que de huevo, hoy es tristemente igual de necesario.
NAUSICAA O/T VALLEY O/T WIND BOX SET (C: 1-0-1) (Nausicaä of the Valley of the Wind Box Set)
Tanto Nausicaä del Valle del Viento como La Princesa Mononoke son obras maestras del estudio Ghibli, cada una con su propia voz y mensaje. Mientras que Mononoke es, sin duda, la princesa más famosa de Ghibli, mi corazón siempre será de Nausicaä. Te invito a descubrir (o redescubrir) estas joyas del cine de animación en Netflix y, claro, no puedo dejar de recomendarte también el manga original de Nausicaä.
-
La noticia
Mononoke es la princesa más famosa de Ghibli, pero mi corazón siempre será de Nausicaä
fue publicada originalmente en
3DJuegos
por
Chema Mansilla
.
What's Your Reaction?