Cómo enfriar rápidamente la cerveza y tomarla en su punto adecuado si no tienes una nevera a mano

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Siento ser yo quien te diga esto, pero la ciencia ya ha explicado que tomarse una cerveza de esas a las que le caen gotitas por la copa no es lo mejor para combatir el calor extremo. Pero siendo sinceras, es difícil resistirse a tomarse una cerveza bien fría si estamos en la playa, en una barbacoa con amigos o en casa, disfrutando del ventilador o el aire acondicionado, si tenemos suerte, mientras el asfalto quema fuera.
En un mundo perfecto, compraríamos la cerveza con antelación y la guardaríamos en la nevera para que cuando quisiéramos tomarla, estuviese fría. Pero el mundo no es perfecto, los despistes existen y no siempre llevamos la lista de la compra hecha. Hay veces en que estamos sentadas en el sofá y nos apetece una cerveza fría que obviamente no tenemos. Bajamos al super y compramos una cerveza, pero no queremos tomarla caliente. Ni templada. La quieres fría como el corazón de tu ex, pero si acabas de compararla, conseguirlo puede llevarte horas. O no, si sigues este truco.
Cómo enfriar rápidamente la cerveza en casa
Miguel Ayuso, director de DAP, nos daba el truco definitivo para enfriar una cerveza si tenemos invitados pero no tenemos cerveza fría en la nevera. En solo 15 minutos podemos tenerla fría y lista para servir, y sin usar la nevera ni el congelador. El truco consiste en usar la ciencia y colocar en un recipiente amplio unos hielos, agua y las latas de cerveza o los botellines. Una vez listo, añadimos sal al agua para reducir la temperatura de congelación de agua con hielo que provocará una bajada de la temperatura del agua más rápidamente. A nivel químico, la temperatura se reduce porque la sal necesita calor para disolverse en el agua, y extrae ese calor de la lata o el botellín, produciendo así una reacción endotérmica que reduce la temperatura de la cerveza rápidamente.
También podemos enfriar la cerveza usando papel de cocina, servilletas o un trapo limpio. Este truco funciona especialmente con botellines y consiste en mojar el trapo o las servilletas en agua, echarle un poco de sal y enrollar las latas o botellas en ello, metiéndolo después en el congelador. En mi caso he probado los dos métodos y el truco del recipiente con agua, hielo y sal siempre es la opción más rápida, fácil y eficaz, y sirve para enfriar cualquier bebida más allá de las cervezas, como refrescos, por ejemplo.
Más allá de refrescarnos, la temperatura es esencial para conservar el sabor
Si queremos rizar el rizo y que la cerveza siempre esté en su mejor momento y no se estropee por un mal almacenamiento, los expertos aseguran que “la luz directa y las altas temperaturas son dos factores que inciden de forma negativa en la conservación de la cerveza”, por lo que mantenerlas en un lugar fresco y libre de luz directa” es una de las mejores formas de conservarlas, aunque hay quien recomienda guardar la cerveza en la nevera en cuanto llegamos a casa y a ser posible, de pie, no tumbada para evitar la oxidación.
Ahora imaginemos que tenemos la cerveza en la nevera y queremos servirla en casa. Una temperatura demasiado fría, como explican los expertos de Directo al Paladar, “mata el sabor de la cerveza, en lugar de realzar sus aromas y sabores”, y la temperatura dependerá del tipo de cerveza que vayamos a consumir. Por ejemplo, las cervezas ale deberían servirse entre los 9°C y los 13°C y las cervezas lager, las que más se consumen en todo el mundo, suelen servirse a una temperatura más baja, entre los 5° y los 9°C. Una cosa: siempre en copa. Ayuso lo comenta como un imprescindible para disfrutar plenamente de la cerveza y de sus matices con todos los sentidos.
Evidentemente, si tenemos la cerveza a una temperatura perfecta pero la copa en la que la servimos está caliente (porque acaba de salir del lavavajillas o porque en casa hace un calor de mil demonios), la cerveza se calentará mucho antes. Puedes meter la copa unos minutos en la nevera, pero nunca en el congelador por varios motivos. El primero es que cuando servimos la cerveza en un vaso o copa helados, la espuma se ve alterada. Además, en casa, es posible que los alimentos del congelador puedan afectar al sabor de la cerveza, como explicaban en La Vanguardia.
Fotos | Ted Lasso
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La noticia
Cómo enfriar rápidamente la cerveza y tomarla en su punto adecuado si no tienes una nevera a mano
fue publicada originalmente en
Trendencias
por
Anabel Palomares
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