El director de The Monkey, Osgood Perkins, no considera que su película pertenezca al género de terror
Después del éxito alcanzado con Longlegs (2024), considerada la versión moderna de El silencio de los corderos (1991), Osgood Perkins vuelve a protagonizar los encabezados de los tabloides, esta vez, gracias al estreno de su más reciente proyecto cinematográfico. Gracias a la entrevista publicada por Bill Bria, pudimos conocer muchos detalles importantes acerca de las impresiones del director, incluyendo su opinión respecto al género cinematográfico al que pertenece, ya que, desde su perspectiva, The Monkey se escapa de los clichés que definen al terror.The Monkey se inclina más hacia la idea de una comedia sangrientaLa forma en la que se transmite el terror en The Monkey es muy particularSin duda, Oz Perkins es uno de los cineastas más impredecibles de los últimos tiempos. Su fórmula para generar terror resulta poco convencional. Precisamente, es el estilo personal del cineasta lo que hace interesante cada propuesta.En el caso de The Monkey, su enfoque parece estar inclinado hacia el humor negro y gore, sin pasar por alto la combinación de dos elementos propios del género terror: la tensión y el suspense. De esta manera, el resultado es completamente desconcertante y abierto a diferentes interpretaciones. Sin complicaciones, el cineasta supo imprimir un gamberro toque de comedia a la obra de King y la convirtió en una película que celebra la risa y el miedo en partes iguales.The Monkey es una comedia amoralDurante el encuentro con Bill Bria, Perkins habló acerca de lo complicado que resulta realizar comedia de terror. Si bien parece casi natural la forma en la que el director consigue llevar a la pantalla historias sangrientas y traumáticas, sin renunciar al entretenimiento, es un proceso complejo.En efecto, la producción deja en evidencia la voluntad lúdica de la propuesta, pero la enmarca en un trasfondo oscuro y siniestro. Todo parece indicar que su intención es demostrar que lo más evidente no siempre es lo ideal.A simple vista, el personaje encaja perfecto en la idea de una película sobre juguetes poseídos y una reflexión deprimente de la muerte, esto no quiere decir que sea el único camino. Aunque se trata de un tema complicado, puede abordarse desde una perspectiva positiva, después de todo, morir es una parte inevitable de la vida.Este pensamiento fue el punto de inflexión en el desarrollo de la producción. Perkins se atrevió a romper los esquemas de lo evidente y apostar por el cine híbrido, sin traspasar la delgada línea que divide una buena historia de una comedia de terror tonta.Perkins se inspiró en escritores de comedia para dar forma a The MonkeyThe Monkey es una película que va más allá del terrorQuizá la razón más evidente por la que el cineasta considera que su película no pertenece al género terror radica en su trabajo se ha visto impactado por la influencia de escritores de cómics y de directores que se inclinan hacia el humor inteligente, incluso cuando se trata de producciones dirigidas al público infantil.De esta forma, si bien tenía claro que The Monkey iba a ser encasillada en el género terror, la experiencia que brinda ofrece sensaciones lo suficientemente agradables para ser mucho más que eso. Efectivamente, la historia se deriva de una obra de King, sin embargo, es lo bastante absurda para ser considerada una sátira estratégicamente exagerada, donde converge la diversión y el miedo.Por ello, se convierte en el tipo de película que apela al subconsciente y la manera en la que cada quien la experimenta. Su propósito fue darle forma y honrar el trabajo del autor, algo que consiguió a través de la puesta en escena de un elemento capaz de generar repudio y aterrorizar, pero que también resulta tierno, divertido y juguetón al mismo tiempo. Esta es la razón por lo que los seguidores del trabajo de Perkins se mantienen a la espera del estreno de Keeper, su nuevo proyecto.En definitiva, el cambio en la trama de The Monkey refleja el estilo que distingue la filmografía de Perkins. Aunque la temática y los elementos visuales de la película la encasillan dentro del género terror, está claro que el director no vacila al momento de asumir riesgos, y explorar otros terrenos. De esta forma, está justificada su postura respecto al tema, por lo que la percepción final depende de las interpretaciones de los espectadores.El artículo El director de The Monkey, Osgood Perkins, no considera que su película pertenezca al género de terror fue publicado originalmente en Alfa Beta Juega.
Después del éxito alcanzado con Longlegs (2024), considerada la versión moderna de El silencio de los corderos (1991), Osgood Perkins vuelve a protagonizar los encabezados de los tabloides, esta vez, gracias al estreno de su más reciente proyecto cinematográfico. Gracias a la entrevista publicada por Bill Bria, pudimos conocer muchos detalles importantes acerca de las impresiones del director, incluyendo su opinión respecto al género cinematográfico al que pertenece, ya que, desde su perspectiva, The Monkey se escapa de los clichés que definen al terror.
The Monkey se inclina más hacia la idea de una comedia sangrienta
La forma en la que se transmite el terror en The Monkey es muy particular
Sin duda, Oz Perkins es uno de los cineastas más impredecibles de los últimos tiempos. Su fórmula para generar terror resulta poco convencional. Precisamente, es el estilo personal del cineasta lo que hace interesante cada propuesta.
En el caso de The Monkey, su enfoque parece estar inclinado hacia el humor negro y gore, sin pasar por alto la combinación de dos elementos propios del género terror: la tensión y el suspense. De esta manera, el resultado es completamente desconcertante y abierto a diferentes interpretaciones. Sin complicaciones, el cineasta supo imprimir un gamberro toque de comedia a la obra de King y la convirtió en una película que celebra la risa y el miedo en partes iguales.
The Monkey es una comedia amoral
Durante el encuentro con Bill Bria, Perkins habló acerca de lo complicado que resulta realizar comedia de terror. Si bien parece casi natural la forma en la que el director consigue llevar a la pantalla historias sangrientas y traumáticas, sin renunciar al entretenimiento, es un proceso complejo.
En efecto, la producción deja en evidencia la voluntad lúdica de la propuesta, pero la enmarca en un trasfondo oscuro y siniestro. Todo parece indicar que su intención es demostrar que lo más evidente no siempre es lo ideal.
A simple vista, el personaje encaja perfecto en la idea de una película sobre juguetes poseídos y una reflexión deprimente de la muerte, esto no quiere decir que sea el único camino. Aunque se trata de un tema complicado, puede abordarse desde una perspectiva positiva, después de todo, morir es una parte inevitable de la vida.
Este pensamiento fue el punto de inflexión en el desarrollo de la producción. Perkins se atrevió a romper los esquemas de lo evidente y apostar por el cine híbrido, sin traspasar la delgada línea que divide una buena historia de una comedia de terror tonta.
Perkins se inspiró en escritores de comedia para dar forma a The Monkey
The Monkey es una película que va más allá del terror
Quizá la razón más evidente por la que el cineasta considera que su película no pertenece al género terror radica en su trabajo se ha visto impactado por la influencia de escritores de cómics y de directores que se inclinan hacia el humor inteligente, incluso cuando se trata de producciones dirigidas al público infantil.
De esta forma, si bien tenía claro que The Monkey iba a ser encasillada en el género terror, la experiencia que brinda ofrece sensaciones lo suficientemente agradables para ser mucho más que eso. Efectivamente, la historia se deriva de una obra de King, sin embargo, es lo bastante absurda para ser considerada una sátira estratégicamente exagerada, donde converge la diversión y el miedo.
Por ello, se convierte en el tipo de película que apela al subconsciente y la manera en la que cada quien la experimenta. Su propósito fue darle forma y honrar el trabajo del autor, algo que consiguió a través de la puesta en escena de un elemento capaz de generar repudio y aterrorizar, pero que también resulta tierno, divertido y juguetón al mismo tiempo. Esta es la razón por lo que los seguidores del trabajo de Perkins se mantienen a la espera del estreno de Keeper, su nuevo proyecto.
En definitiva, el cambio en la trama de The Monkey refleja el estilo que distingue la filmografía de Perkins. Aunque la temática y los elementos visuales de la película la encasillan dentro del género terror, está claro que el director no vacila al momento de asumir riesgos, y explorar otros terrenos. De esta forma, está justificada su postura respecto al tema, por lo que la percepción final depende de las interpretaciones de los espectadores.
El artículo El director de The Monkey, Osgood Perkins, no considera que su película pertenezca al género de terror fue publicado originalmente en Alfa Beta Juega.
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