Mucho antes de machacar zombis en The Walking Dead, Norman Reedus protagonizó una peli de acción tremenda que no recuerda prácticamente nadie

Para mí Norman Reedus es uno de esos actores que siempre hace de Norman Redux, independientemente del personaje que interprete, da igual que sea llevando paquetes en un juego de Kojima, reparando el motor del coche de Blade o machacando zombis por el mundo. Pero hay una película suya que me gusta mucho y me parece uno de sus mejores trabajos, una peli de acción que casi nadie conoce y que merece más cariño: The Boondock Saints (Los Elegidos, en España).

Un diamante en bruto de acción infravalorada

Cuando Los Elegidos llegó a los cines en 1999, pasó prácticamente desapercibida en taquilla. Sus coreografías de lucha callejera, el ritmo vertiginoso y su humor negro no encontraron espacio en un mercado saturado de blockbusters de alto presupuesto, donde lo visual muchas veces primaba sobre la personalidad de los personajes. En España, la película apenas se estrenó en un par de cines independientes y, tras un breve paso por videoclubs, quedó relegada al olvido. Sin embargo, con los años hay ido arañando un estatus de culto, especialmente entre la Gen-X, aquellos boomers que vivieron los últimos coletazos la fiebre del cine doméstico y el tipo de gente que sabe quién es Ron Jeremy.

El guion, que Troy Duffy escribió impulsado por una experiencia traumática en su vida cotidiana (al regresar de trabajar y encontrar un cadáver en su vecindario), combina violencia estilizada con un trasfondo moral sorprendentemente profundo. Los hermanos MacManus, interpretados por Reedus y Sean Patrick Flanery, se convierten en vigilantes con un código ético propio, mientras que las calles de Boston sirven de escenario para una acción constante y magníficamente coreografiada. Peli era una producción muy modesta comparada al estreno de ese mismo año, sobradas también de carisma, tiroteos, abrigos y gafas de sol, como Matrix, y fue un auténtico fracaso: costó unos seis millones de dólares y su recaudación no alcanzó ni los 50.000 dólares. No, no falta ningún cero, cincuenta mil. Claro, se estrenó solo en 5 cines de Estados Unidos y estuvo en cartelera apenas una semana. Pero con el tiempo la peli fue encontrando su público, e incluso se planeó un videojuego cooperativo basado en la película, desarrollado por Critical Mass Interactive en 2012, que nunca vio la luz, reforzando el aura de mito que rodea a Los Elegidos.

Willem Dafoe en un papel insólito y magnético

Si los hermanos MacManus aportan el músculo y el ritmo de la película, Willem Dafoe es el genio interpretativo que sostiene la trama. En la piel del agente del FBI Paul Smecker, Dafoe se desmarca de sus personajes más habituales y encarna a un investigador excéntrico, casi obsesivo. Entre monólogos sobre justicia divina y revelaciones místicas, Smecker se convierte en un contrapunto cerebral a la furia justiciera de los MacManus.

Cada escena en la que Dafoe aparece se convierte en una demostración de carisma contenido. Su capacidad para oscilar entre la ternura y la amenaza es tremenda y eleva la película más allá de la mera orgía de balas. Si necesitas un motivo para ver esta peli, es este. No es casualidad que su trabajo aquí sea considerado uno de los papeles más interesantes de su carrera: aporta una complejidad y un matiz que rara vez se encuentra en películas de acción de bajo presupuesto de finales de los noventa. La interacción entre Smecker y los hermanos, junto con escenas de acción pura y dura, consigue que la peli resista el paso del tiempo y continúe enganchando a nuevas generaciones de espectadores.

Entre la toxicidad de su director y la promesa de una tercera entrega

Si hay un personaje que ha marcado la leyenda de Los Elegidos tanto como sus protagonistas, ese es Troy Duffy. Su valor a ala hora de sacar adelante este proyecto se vio empañada por su temperamento imprevisible. Duffy protagonizó todo tipo de altercados: enfrentamientos con ejecutivos de Miramax, acaloradas peleas con los actores y cambios de guion de última hora que se han convertido en leyenda dentro del fandom. Incluso se cuentan anécdotas como su frustrante encuentro con Ewan McGregor, al que quiso seducir con una "scottish-Irish love affair" y que terminó en una pelea de borrachos tras un desencuentro sobre la pena de muerte.

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Estos episodios, documentados en Overnight (2003), revelan a un Duffy egocéntrico y a veces abusivo, lo que contribuyó a echar por tierra su megadeal inicial con Miramax. Aun así, la saga sobrevivió gracias a su persistencia y al apoyo de los fans: Los Elegidos II: All Saints Day se estrenó en 2009 y recaudó más de 50 millones en ventas de DVD, a pesar de una distribución limitada y un presupuesto menor. Actualmente, parece que Los Elegidos III: Legion ya tiene guion, con Reedus y Flanery confirmados. Aunque la financiación ha sido un obstáculo constante, los fans han mantenido viva la llama de la saga. La fama lograda por Reedus en los últimos años gracias a The Walking Dead también ha sido de gran ayuda, está claro. 

Hoy, si quieres redescubrir a Norman Reedus antes de los zombis y ver un ejemplo de cine de acción independiente que combina tensión, humor y personajes memorables, puedes ver hoy mismo Los Elegidos en Prime Video. 

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